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Durante toda nuestra historia podemos encontrar evidencias de que todo "cambio" o "nueva verdad" ha
tenido que pasar por pruebas o períodos hasta consolidarse y aceptarse.
La "verdad" en diferentes épocas ha sido propiedad de quienes han ejercido el poder de "control" del conocimiento, prueba de ello es el período de Oscurantismo previo al Renacimiento del siglo XVIII. Pero el cambio siempre ha generado oposición en todas las épocas y la actual no es la excepción. Modernamente hablando podemos citar a transformadores como Billroth, Gross, Halstead quienes tuvieron igualmente que convencer proponiendo nuevas verdades. El común denominador de un Lister, un Koch o un Wangensteen ha sido fuera de su capacidad intelectual, su dedicación y perseverancia al trabajo. A finales de la década pasada la comunidad quirúrgica mundial se encontró con otra propuesta de cambio esta vez de tipo tecnológico en la manera de abordar al paciente a través de la cirugía de invasión mínima que también paso su período de prueba y ha sido aceptada en la actualidad.
Da la impresión sin embargo de que la ciencia médica esta siendo orientada hacia el uso en demasía de la
tecnificación, que el recurso está siendo mal usado por la parte médica, en el sentido de sustituir la
interpretación de datos de la clínica médica y esto es algo que está pasando aún en países como los nuestros
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